La salud dental, como ya hemos comentado algunas veces, es la gran olvidada en materia sanitaria por parte de todo el mundo. Se trata de una rama de la salud de la cual solo nos preocupamos cuando empezamos a detectar alguno de los programas que están relacionados con ella. Si no nos duele nada en la boca, solemos olvidar la importancia que tiene la prevención en lo que respecta a la salud dental. Sin embargo, cuando tenemos algún dolor, la agudeza de ese dolor nos hace querer ir al dentista con la mayor de las prisas.
En España, la salud dental de la gente siempre ha presentado alguna clase de dificultad porque somos la clase de personas, siempre hablando en términos generales, que suele esperar hasta el último momento para acudir al dentista. Tradicionalmente, nos ha dado miedo todo lo que tenga que ver con este especialista y está claro que es un miedo injustificado, porque los odontólogos de este país son de los mejor valorados en todo el mundo. Cambiar esa tendencia es un aspecto que se ha procurado desarrollar de un tiempo a esta parte y lo cierto es que algo hemos conseguido.
Queremos hablar, una vez indicado todo lo anterior, de uno de los problemas de índole dental que más debería asustarnos. Nos referimos a la pérdida de un diente o una muela. Por diferentes motivos, una persona puede perder una de las piezas que forman parte de su boca. Puede ser a raíz de una caída fortuita o por un desgaste ocasionado por la falta de higiene dental. El caso es que se trata de algo que requiere de una solución. En términos estéticos, no quedaría nada bien que, a la hora de sonreír, se viera un hueco entre dos de nuestros dientes. Si hablamos de una muela del juicio, que prácticamente no se ve, igual no pasa nada. Pero conviene que tengamos cuidado con estas cosas.
Según lo que indicaba el portal web Consejo Dentistas en una de sus noticias, el tratamiento dental más solicitado a lo largo del año 2020 fue el implante dental. Y es que son muchas más personas de las que imaginamos las que se tienen que enfrentar a una situación como la de la pérdida de una pieza dental. Además de todo lo que ya hemos mencionado, debemos tener en cuenta la incomodidad que provoca este hecho a la hora de comer. La cantidad de comida que se nos puede acumular en la zona afectada por esa pérdida puede provocar infecciones y muchas más molestias.
Según el portal web Gaceta Dental, hay una clase de personas que sufren en mayor instancia este tipo de problemas. Hablamos, como no podía ser de otra manera, de los mayores. Estamos hablando de un grupo de población que ha vivido la llegada de todos los avances médicos y tecnológicos en una parte muy avanzada de su vida y que, por lo tanto, no ha tenido la posibilidad de disfrutar de ellos a lo largo de su existencia. Por tanto, su educación no se produjo en un contexto en el que el cuidado dental fuera tan posible y accesible como ahora. Eso es lo que ha hecho que su salud dental sea peor que la de la gente joven y que, por tanto, hayan sufrido una pérdida más numerosa de dientes y muelas.
Los implantes dentales se han convertido en una de las necesidades más grandes de la población española en lo que respecta a la salud dental. Y este es un dato que denota un problema grave: que no cuidamos lo suficiente de nuestros dientes. Los profesionales de Cio Arturo Soria nos han indicado que, aunque son los ancianos y ancianas quienes más padecen este problema, es preocupante el aumento de jóvenes que han empezado a necesitar implantes dentales como consecuencia de una mala salud dental.
La necesidad de tener una buena imagen física nos conduce al dentista
Uno de los motivos por los que acuden más jóvenes ahora que antes al dentista para solicitar un implante es el hecho de que la sociedad de la imagen nos obligue a cuidar de nuestra apariencia física. Y esa apariencia, si nos falta un diente, se resiente de una manera realmente grande. Lo mejor es que tengamos en cuenta todas las implicaciones que tiene esto más allá de la imagen y que no solo nos quedemos con esto.
Sí que es cierto que, en este caso, que exista una cierta presión social en materia de imagen nos viene bien para mejorar nuestra salud dental con un implante. Lo idóneo sería que todo el mundo fuera capaz de prever situaciones como esta y que tomara las precauciones necesarias para que se previniera ya no solo la caída de un diente o muela, sino para mejorar cualquier tipo de problema, por pequeño que sea, que se origine en nuestra boca.
