28 junio, 2017
Si nadar es bueno, hacerlo en una piscina, al sol y en una de las zonas más guapas de Europa, no tiene precio. Y es que estoy en uno de los lugares más bonitos de Francia, en Villa de San Juan de Luz, y ya sé, ya sé, qué hago en una piscina cuando puedo estar en una playa paradisíaca, y es verdad, pero tengo que reconocer que el mar me da algo de miedo y no me gusta demasiado alejarme, así que me quedo en la orillita y ni nado, con lo que me gusta. Por eso, prefiero hacerme unos buenos largos en el pedazo de casaza que tiene mi nuevo ligue, François.